Durante los días 31 de marzo y 1 de abril los pobladores de las cuencas de los ríos Atrato, San Juan y Baudó sufrieron amenazas de los paramilitares del "Clan Úsuga", que crearon pánico y terror en las comunidades. La CRPC a través del comunicado que transcribimos a continuación exige al Estado disponer de toda su capacidad para detener la acción violatoria contra el DIH, los DDHH y el Derecho de los Pueblos.