El pasado 13 de mayo se conoció que Estados Unidos declaró a Cuba como país que apoya el terrorismo. El argumento principal es que alberga en su territorio a miembros de la guerrilla del Ejército de Liberación Nacional-ELN.
Calificación que fue celebrada por el Gobierno Nacional a través del Alto Comisionado para la Paz, quién manifestó: “hay un espaldarazo del gobierno de EE. UU. al gobierno de Colombia y a la insistente solicitud del presidente Duque y la Cancillería de ser entregadas estas personas a la justicia colombiana”.
Como comunidades del Pacífico que padecemos a diario el absurdo conflicto armado en nuestros territorios y le hemos apostado a la salida negociada porque es el único camino tras más de 50 años de confrontación armada, expresamos:
1. Rechazo a la perfidia Gobierno Nacional ante el desconocimiento del Derecho Internacional. Compartimos el concepto jurídico que le fue entregado al Presidente Duque por Federico Mayor Zaragoza, ex director general de la Unesco, en julio de 2019, que junto con otros juristas internacionales sustenta que Cuba no puede extraditar a los miembros del ELN porque está obligada a cumplir el derecho internacional, al igual que el Gobierno Nacional debe garantizar el retorno de esta delegación cumpliendo con los protocolos que firmó el Estado colombiano con el ELN, en 2016, con el respaldo de los países garantes.
2. Convocamos al Presidente Iván Duque al cumplimiento de los protocolos en su integralidad para liberar a Cuba de tal injusta e inmerecida condena, y a retomar con sinceridad la Constitución y la ley, rompiendo los vínculos con los grupos paramilitares que aún persisten en miembros de las Fuerza Pública, como sendero para la salida negociada a ese conflicto que sigue prolongándose y degradándose.
3. Solicitud de intervención a Antonio Guterres, Secretario General de la Organización de las Naciones Unidas.
Ante la perfidia del actual Gobierno Colombiano de desconocer los protocolos, hacemos un llamado al Secretario General de la Organización de las Naciones Unidas para que facilite una solución que sea coherente con el rol que ha asumido la comunidad internacional, a quienes les agradecemos sus esfuerzos en la búsqueda de paz en Colombia.