La Asociación de Consejos Comunitarios y Organizaciones del Bajo Atrato, ASCOBA, el Consejo Mayor de la cuenca del río Salaquí y la Parroquia Nuestra Señora del Carmen de Riosucio, queremos dar a conocer la grave situación que a diario enfrentan las comunidades negras e indígenas del río Salaquí por cuenta de las constantes inundaciones y palizadas que afectan esta importante vía de comunicación del municipio.
La cuenca del río Salaquí, jurisdicción del municipio de Riosucio, está conformada por doce (12) Consejos Comunitarios (Playa Aguirre, Villanueva, Tamboral, San José de Tamboral, Salaquisito, Playa Bonita, Caño Seco, Pueblo Nuevo, Arenal, Coco Arenal, Las Delicias, Regaderos y Río Ciego) y cuatro (4) comunidades indígenas (Barranco, Isletas, Unión Chamí y Pueblo Antioquia). Estas comunidades son esencialmente productoras agrícolas y pecuarias (plátano, arroz, maíz, yuca, caña, frutales, cría de cerdos, ganadería etc.), y se dedican también al aprovechamiento de recursos maderables.
Lamentablemente estas comunidades atraviesan enormes dificultades para realizar sus trabajos y la comercialización de sus productos debido a la sedimentación del río y al taponamiento ocasionado por las constantes palizadas e inundaciones.
Las crecientes, inundaciones y avalanchas no sólo dificultan el transporte de la gente sino que generan pérdida de los cultivos de pancoger, daños a las viviendas y pérdida de animales. Además, las palizadas dificultan la movilidad de las comunidades y el transporte de las personas enfermas que necesitan atención médica de urgencia. VER VIDEO
Toda esta situación agudiza la vulnerabilidad de estas comunidades, quienes además de enfrentar inseguridad y abandono estatal tienen que lidiar ahora con las consecuencias de estos fenómenos naturales, lo que genera un ambiente de inestabilidad y zozobra permanente entre todas las familias de esta cuenca.
Como consecuencia de estas constantes dificultades que ocasionan cuantiosas pérdidas a las comunidades del río Salaquí, la Junta Directiva del Consejo Mayor ha venido adelantando gestiones en los últimos años con miras al destaponamiento del río y poder darle de esta manera solución permanente a la problemática de las palizadas e inundaciones. Por ello se han realizado diferentes solicitudes ante instituciones públicas como la Alcaldía municipal, la gobernación de Chocó o el Ministerio de Transporte.
Esta situación ha sido denunciada ante las autoridades desde los años noventa, cuando por cuenta de los permisos que daba el Estado a través del ministerio de Medio Ambiente y Codechocó a las empresas madereras, como Maderas del Atrato, Maderas del Darién, Maderas de Urabá, Madurex, Triplex Pizano. Sin ningún control y haciendo una explotación irracional, han sido las causantes de la problemática actual por toda la madera que dejaron en el cauce del rio, además, de la tala de todos los árboles de las orillas de los ríos. A esta situación, se le suma el desplazamiento forzado y las constantes inundaciones, ya que no pudieron efectuarse los trabajos que las comunidades adelantamos a diario para evitar el taponamiento del río. Hasta el momento no se ha podido encontrar respuesta efectiva de las autoridades y la sedimentación sigue su curso irreversible.
Ante la desesperada situación, las comunidades de la cuenca solicitaron a la Alcaldía municipal apoyo en combustible y alimentos para organizar ellas mismas comisiones de trabajo con las que se ha logrado abrir paso a embarcaciones pequeñas. Estas embarcaciones apenas logran transportar los alimentos y productos familiares pues las embarcaciones que podrían transportar los productos que se podrían comercializar (plátano o maíz, por ejemplo) no pueden atravesar estas enromes palizadas.
La Asociación de Consejos Comunitarios y Organizaciones del Bajo Atrato, ASCOBA, el Consejo Mayor de la cuenca del río Salaquí y la Parroquia Nuestra Señora del Carmen de Riosucio exigimos a las autoridades municipales, departamentales y nacionales que atiendan este serio problema antes de que la sedimentación sea irreversible. Con el taponamiento de los ríos se ven afectadas no sólo las comunidades locales, sino que también se generan profundos impactos ambientales que ponen en riesgo la biodiversidad de esta importante región. Exigimos que se movilice el personal necesario y la maquinaria indispensable para destapar el río Salaquí y mantener su cauce libre de nuevas palizadas.
El río Salaquí es la única vía de transporte y comunicación que poseen más de 16 comunidades negras e indígenas y el cierre de esta vía ocasionará una crisis humanitaria de grandes proporciones. Hacemos un llamado urgente a las autoridades competentes para evitar que esta situación empeore.
Atentamente,
Asociación de Consejos Comunitarios y Organizaciones del Bajo Atrato–ASCOBA
Consejo Mayor de la Cuenca del río Salaquí –COCOMACUSAL
Parroquia Nuestra Señora del Carmen, Riosucio.